¿Y ahora qué?

La segunda peor cosa que puede suceder luego de llegar a casa y descubrir que hemos perdido la llave, es romper la llave mientras intentamos abrir la puerta. Esta horrible situación a veces sucede porque, sin querer, ponemos la llave incorrecta en la cerradura o porque ejercemos más fuerza de la necesaria.
Esta persona tan desafortunada tuvo que llamar al cerrajero y sentarse a esperar. Sabemos que la ayuda no siempre llega rápido cuando la necesitamos; pero luego de esto, no hay dudas que nada podría hacer este día peor.

