Las cosas se desmoronan
A nadie le gusta despertar en un día nevado. Primero, hay hacerse camino cuidadosamente caminando con nieve hasta las rodillas para finalmente llegar al vehículo. Una vez ahí, comienzan con la dura tarea de palear la nieve del camino para poder salir. Mientras todo esto sucede, se les ocurre chequear si la batería del automóvil se encuentra en condiciones de funcionar.
Toman la manija de la puerta del conductor y la manija se desarma. Esperemos que el dueño del vehículo tenga las llaves cerca y que el automóvil funcione perfectamente.